La mejor herramienta para evitar los posibles riesgos y daños asociados al cannabis prensado que se adquiere en el mercado negro es el autocultivo. No obstante, en caso de consumir marihuana prensada es posible reducir riesgos siguiendo algunos pasos:
– Chequeo previo: Si el prensado tiene hongos u olor a pesticida o a podrido, conviene descartarlo, ya quesu consumo puede producir enfermedades (especialmente pulmonares) o reacciones alérgicas. Un hongo muy común en el prensado es el Aspergillus, que puede causar afecciones pulmonares, principalmente en quienes tienen su sistema inmunológico comprometido.
-Testear al momento del uso: Si al fumar tiene sabor a insecticida, si da dolor de cabeza, fotofobia o decaimiento, también debe descartarse de inmediato ya que son síntomas de la presencia de pesticidas neurotóxicos.
– Limpieza: Siempre es recomendable quitarle las hojas, ramas y semillas previamente a su consumo.
– Almacenamiento: Para mantener el prensado durante un tiempo sin que se pudra, lo más recomendable es envolverlo en varias bolsas de plástico (5 a 7) y guardarlo en el freezer hasta el momento de su uso.
– El prensado, por su mala calidad, es particularmente no aconsejable para usuarios medicinales.