La pandemia causada por el COVID- 19 cambió la vida cotidiana de millones y millones de personas en todo el mundo. Quienes usan cannabis, no son la excepción.
Si bien existen algunas precauciones básicas a tener siempre en cuenta, usuarios y usuarias fueron implementando nuevas prácticas para compartir las risas y evitar el contagio de coronavirus.
El 2020 comenzó como una película de terror vista desde los sillones que, con los meses, pasó a transformarse en “una nueva normalidad”. El trabajo remoto, el uso del barbijo y el distanciamiento social son prácticas que parecen haberse establecido para este nuevo año.
La pandemia no ha terminado: Argentina está cerca de alcanzar los dos millones de contagiados y por día siguen muriendo cientos de personas a causa de la enfermedad.
La pandemia no ha terminado: Argentina está cerca de alcanzar los dos millones de contagiados y por día siguen muriendo cientos de personas a causa de la enfermedad.
Porros individuales, tuqueros personales, pipas manuales y sanitización de vaporizadores son algunos de los nuevos hábitos que marcan el día a día de la sociabilidad cannábica. THC habló con un epidemiólogo para verificar su efectividad.
Lo básico
En primer lugar, hay que tener en cuenta que “el coronavirus se transmite por vía respiratoria, a través de las gotas que se esparcen cuando uno habla o respira, simplemente”, explica en diálogo con la THC Lautaro de Vedia, médico del Hospital Muñiz y ex Presidente de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI).
“Mantener distancia y usar barbijo son premisas básicas para evitar el contagio”, asegura Lautaro de Vedia, médico del Hospital Muñiz y ex Presidente de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI)
“Mantener distancia y el uso de barbijo son premisas básicas para evitar el contagio”, dice el doctor y agrega que también “se puede contraer el virus mediante el tacto, porque puede permanecer sobre una superficie que se toque y que luego ingresemos a la vías respiratorias”.
Además, de Vedia explica que “la enfermedad se contagia desde las 48 horas previas a la presentación de síntomas (como fiebre, tos y falta de olfato, entre otras) durante diez días, en promedio”. Aunque también existen aquellos portadores de coronavirus que son asintomáticos y pueden transmitirlo de todos modos.
El porro individual
“Cambiaron un montón de cosas desde que arrancó la pandemia y el consumo de cannabis es una de ellas. Con mis amigues, ahora fumamos con protocolos sanitarios. Cada persona tiene su propio porro”. La persona que habla es Paula Maltz (30).
“Al principio de la pandemia, nadie se veía. La marihuana fue una gran compañía dentro de la soledad”, recuerda Maltz sobre los meses de marzo a septiembre. Luego, “desde que nos empezamos a encontrar con amigues, sucede en espacios libres como terrazas o plazas”.
Muchas personas optan por sociabilizar con porros individuales. “Me parece la opción menos riesgosa”, sostiene el especialista
“Siempre fumamos porro y cada uno lleva el suyo para no compartir la pitada”, cuenta la joven el protocolo que implementa, al igual que sucede con vasos, el uso de barbijo y el distanciamiento. “Aprendimos a tener otro tipo de contacto”, reflexiona Maltz.
Maltz detalla que con su grupo de amistad puede tener porros individuales porque todos tuvieron una buena cosecha en el pasado otoño. Pero no siempre sucede así.
“El porro individual me parece la opción menos riesgosa”, aporta de Vedia. Es una práctica aceptable, siempre que no haya ningún contacto y se mantenga una distancia de más de dos metros en espacios abiertos.
Por supuesto, al hacerlo en espacios abiertos, de ser públicos las personas van a exponerse a ser vistas por alguna fuerza de seguridad. La prohibición dificulta incluso las prácticas seguras.
Lo más indicado es encontrarse en espacios abiertos, pero de ser públicos las personas van a exponerse a ser vistas por alguna fuerza de seguridad. La prohibición dificulta incluso las prácticas seguras
Por otra parte, sólo retirarse el barbijo en los segundos que dura la inhalación y la exhalación que no debemos realizar sobre nadie. Luego es necesario volver a usar el barbijo.
Tuqueros personales
“Cuando empecé a juntarme con mis amigos, implementamos la del tuquero personal porque eran una o dos personas las que aportaban las flores”, cuenta Nahuel Silvestro (29). Esto consiste en el armado de un porro y, a medida que se gira en la ronda, cada uno le inserta un tuquero para dar la pitada.
De esta manera, algunas personas confían que se reducirían las chances del contagio porque no se apoyarían los labios en un lugar que lo hagan varias personas. Sin embargo, los especialistas tienen su posición contraria a esta práctica.
“Algo puede frenar, pero no es 100% seguro. Se está aspirando el mismo cigarrillo y son elementos que no cuentan con un filtro especial. La persona que tenga coronavirus, lo va a estar impregnando y esparciendo”, asegura también de Vedia sobre esta a práctica.
Un tuquero no es 100% seguro. Si se está inhalando del mismo porro la persona que tenga coronavirus, lo va a estar impregnando y esparciendo
Una alternativa al tuquero consiste en replicar una pipa personal con el puño: se realiza sujetando el porro con el meñique y abrir la mano progresivamente desde el anular hasta el dedo índice.
Respecto a esto de Vedia es tajante: “De ninguna manera evita el contagio. Si el virus quedó por una persona que fumó, va a quedar impregnado. La distancia es ínfima. Podemos decir que es ‘mejor’ que fumarlo directamente, pero de ninguna manera es una práctica que reduzca las posibilidades de contagio”.
Vaporizador sanitizado
Por otro lado, hay personas que utilizan artefactos más sofisticados para compartir el cannabis. Como Ana Sky (33), quien usa un vaporizador.
“Entre fumada y fumada, rociamos la boquilla con alcohol en gel en spray y después limpiamos con un trapito de cocina limpio. Lo hicimos alrededor de cinco amigos y ninguno se contagió de coronavirus”, cuenta la joven sobre el protocolo “más riguroso que cuando vamos al supermercado”.
La sanitización del vaporizador no es tan eficiente como el porro personal porque alguien puede no ser tan riguroso en el limpiado
Si bien el infectólogo confirma que el alcohol en gel elimina al virus, destaca que la sanitización del vaporizador no es tan eficiente como la marihuana personal porque “alguien puede no ser tan riguroso en el limpiado”.
Riesgos en el humo
De Vedia insiste que cualquier protocolo cannábico “debe realizarse al aire libre y con una ventilación asegurada”. El médico alerta que el humo también puede transmitir el coronavirus; un peligro que, hasta el momento, no había sido revelado.
El humo en sí no contagia. Pero cuando uno exhala hay presencia de gotas de saliva que cargan con el virus
“El humo en sí no contagia. Pero cuando uno exhala hay presencia de gotas de saliva que cargan con el virus. A los dos metros, el coronavirus cae al suelo por su propio peso. Por eso, hay que mantener la distancia y procurar el aire libre o la ventilación”, concluye el infectólogo.