Los hongos pueden generarse no solo durante el cultivo, sino que también pueden desarrollarse durante el proceso de secado y curado. Si encontramos cogollos con hongos, ¿podemos consumirlos?
La aparición de moho en los cogollos es un fenómeno común del cultivo y puede suceder tanto en interior como en exterior sin indicadores previos salvo los parámetros del clima.
Si son detectados a tiempo, no infligen grandes daños a la cosecha. En otras circunstancias, pueden ser catastróficos y arruinar un jardín entero.
Bajo ninguna circunstancia es buena idea utilizar cogollos afectados por mohos u hongos. Estos pueden liberar micotoxinas y provocar alergias o neumonías en personas susceptibles o inmunodeprimidas.
En el caso del moho Botrytis, existen varias evidencias científicas que lo vinculan a una forma rara de neumonitis por hipersensibilidad (también conocida como Alveolitis alérgica extrínseca) provocada por la exposición a sus esporas.
Si bien no existen estudios directamente vinculando esta patología a usuarios y usuarias de cannabis, no se recomienda el uso de cogollos infectados con este género de mohos.
Bajo ninguna circunstancia es buena idea utilizar cogollos afectados por mohos u hongos. Estos pueden liberar micotoxinas y provocar alergias o neumonías en personas susceptibles o inmunodeprimidas
Una cuestión diferente es la presencia de Aspergillus, común en vegetales en proceso de descomposición y un contaminante común en el caso de Cannabis cuyo proceso de secado y curado fue deficiente, algo especialmente común en la marihuana prensada.
La presencia de este hongo es delatada por una película blanca que prospera con la falta de oxígeno y alta humedad.
También puede suceder en cosechas caseras donde el curado y almacenado final no es realizado en condiciones ideales de humedad aunque es menos frecuente.
El consumo de cannabis infectado con este hongo puede ocasionar una enfermedad llamada aspergilosis, que puede provocar neumonías invasivas y otras patologías severas del sistema respiratorio. Es especialmente perjudicial en personas inmunodeprimidas.
A la hora de utilizar un cogollo, mientras observamos sus características como presencia de resina, manicurado y textura, es buena idea también revisar si posee rastros de presencia de mohos u hongos.
Esto se comprueba fácilmente a simple vista: debemos descartar cogollos que presentan zonas decoloradas, grises o marrones, que se deshacen al tacto.
A diferencia de un cogollo bien secado y curado, que puede presentar otras coloraciones diferentes a la flor viva, las áreas afectadas por hongos son más frágiles y se desprenden con facilidad.
Otro indicador es el aroma: cualquier rastro de aromas a humedad o amoníaco, debemos revisar más profundamente el cogollo. En algunos casos corresponde a un mal curado o secado, en otros puede indicar la presencia de hongos.
Aunque otras formas de administración del cannabis como su uso en alimentos puede evitar el impacto en el sistema respiratorio, no existen investigaciones científicas sobre la permanencia de hongos y esporas en este tipo de preparaciones y como su uso podría afectar a la salud.
De todas maneras, la recomendación general es evitar su uso.