Luego de una sesión breve, el Senado media sanción al proyecto de ley que regula la industria del cannabis medicinal y el cáñamo.
Fue con 56 votos a favor y 5 votos en contra y una abstención. Los votos no afirmativos fueron principalmente de legisladores y legisladoras de la oposición.
El proyecto del oficialismo se presenta en un contexto complejo. El cannabis sigue prohibido por la ley penal (23.737): hasta la mera tenencia de una semilla sigue siendo considerada delito. Detenciones y allanamientos de personas que usan y cultivan cannabis son parte de la escena diaria.
Sin embargo, el cannabis medicinal generó un escenario nuevo que convive con la norma penal.
Por un lado, cada vez más personas se inscriben en el Reprocann que permite el cultivo personal, solidario y colectivo de cannabis medicinal.
Por otro, ya avanzaron más de un centenar de proyectos vinculados a la producción y la investigación del cannabis en todo el país. Según los registros oficiales se trata de 22 iniciativas provinciales y 80 a nivel municipal.
El plan del Poder Ejecutivo es crear un marco regulatorio tanto para los proyectos productivos ya existentes, como para los nuevos.
El objetivo central del proyecto es regular de punta a punta la cadena productiva del cannabis que se habilita para uso terapéutico y también de la industria cañamera. Se trata de establecer normas para impulsar desde el cultivo hasta incluso la exportación.
La expectativa por las licencias
En un contexto de crisis que la Argentina atraviesa hace años y que fue profundizado por la pandemia del coronavirus, en Casa Rosada miran con expectativa a la industria del cannabis como un eslabón fundamental en la recuperación económica.
De hecho, un documento elaborado por el Ministerio de Desarrollo Productivo a cargo de Matías Kulfas estima que, con la habilitación de esta industria, se crearían diez mil nuevos puestos de trabajo, se generarían US$ 500 de mercado interno y otros US$ en exportaciones, en los próximos tres años.
“La ley brinda un conjunto de herramientas que nos va a permitir diversificar nuestra matriz productiva”, sostuvo la senadora rionegrina Silvina García Larraburo (FdT).
“Va a permitir incorporar valor agregado y trabajo de calidad, lo que generará nuevas divisas”, aseguró. Y agregó: “Esta ley ofrece una enorme oportunidad para los pequeños productores de las provincias”.
“Esta ley va a permitir incorporar valor agregado y trabajo de calidad, lo que generará nuevas divisas, ofrece una enorme oportunidad para los pequeños productores de las provincias”, sostuvo la senadora Silvina García Larraburu
Justamente este último es uno de los puntos que más concentra la atención. Quiénes tendrán los permisos para desarrollar sus actividades en cada una de las instancias de la cadena productiva: desde el cultivo hasta la comercialización es parte central de la discusión.
En el proyecto se prevé dar preferencia a los pequeños y medianos productores en la otorgación de las licencias.
De hecho, según manifestó el Ministro de Desarrollo Productivo durante el lanzamiento del proyecto la ley incorporaría a todas las asociaciones y cooperativas que hace años trabajan en la temática.
Incluso, se estipularía su acompañamiento mediante una serie de beneficios financieros, a través del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES)
Votos a favor
Quien abrió el debate fue el senador Adolfo Rodríguez Saá quien destacó el ampliar la posibilidad de acceso al cannabis es la base de una mejor política sanitaria.
“Esto es lo que estamos legalizando: que esa persona enferma pueda acceder legalmente y sin clandestinidad al alivio o remedio de su enfermedad”, aseguró.
“Yo tengo fibromialgia y sé lo difícil que es vivir con estos dolores, cuando de repente un aceite puede mejorar la calidad de vida. Eso ya me hace enormemente feliz. No importa la ideología política que tengamos, trabajamos por el bienestar de los argentinos”, dijo por su parte la senadora Cristina López Valverde.
En el debate se instaló la necesidad de discutir una regulación integral: “Esto es lo que tenemos que incluir en el debate con coraje”, aseguró el senador Alfredo Luenzo
Además, otros senadores dejaron la puerta abierta para nuevos debates entorno al cannabis. “El prohibicionismo es un gran problema que tiene que enfrentar el mundo. Lo único que hace es alentar el narcotráfico… si tomamos la agenda de muchas organizaciones de base y si vemos los riesgos de la despenalización del cannabis en su totalidad, vamos a ganarle la batalla al narcotráfico. Esto es lo que tenemos que incluir en el debate con coraje”, aseguró Alfredo Luenzo.
Votos en contra
El argumento para votar contra el proyecto es su supuesta falta de federalismo, dado que la ley busca crear la Agencia Regulatoria del Cáñamo y del Cannabis Medicinal (ARICCAME) que estaría en la órbita del Estado Nacional.
La ARICCAME sería el organismo competente para reglamentar, controlar y emitir las autorizaciones administrativas con respecto al uso de semillas de la planta de cannabis, del cannabis y de sus productos derivados.
En concreto, sería la autoridad que entregue las licencias para llevar adelante todas las actividades de la cadena productiva tanto del cannabis con fines medicinales, como del cáñamo.
Durante el debate en comisiones este fue uno de los temas centrales de discusión, dado que para algunos senadores sostuvieron que esto pondría restricciones a las autonomías provinciales.
Por ese motivo, en el debate previo, la senadora por San Luis, María Eugenia Catalfamo introdujo una modificación para crear un Consejo Federal para que las provincias participen de la ARICCAME. Pero las opiniones de dicho Consejo no serían vinculantes, de ahí el rechazo de varios legisladores.
La principal crítica de quienes votaron por la negativa fue la falta de peso de las provincias en la decisiones de la Agencia que regularía la industria. “Nos estamos alejando cada vez más del federalismo”, dijo la senadora Pamela Verasay
“Se buscó la mejor ley, pero no se logró”, sostuvo la senadora mendocina Pamela Verasay. “Nos estamos alejando cada vez más del federalismo de concertación que tanto estamos buscando. No alcanza con un consejo de representación cuando la decisión final recae en una agencia nacional. Por eso nos vamos a oponer a la ley”, expuso la legisladora de Juntos por el Cambio.
En ese mismo sentido se expresaron todos los senadores y senadoras que rechazaron el proyecto impulsado por el oficialismo.
En estos días el proyecto será girado a las comisiones de la cámara de diputados para que comience su discusión y luego se llevará a votación.
El escenario, al menos en lo que respecta a una parte del enorme fenómeno generado por el cannabis, está en movimiento.