Enfrentar plagas en el cultivo es algo común, y eliminarlas también es algo sencillo si contamos con las prácticas y herramientas necesarias. Para eso es clave saber cómo usar el aceite de neem, el poderoso insecticida ecológico.
Recordemos que una planta que convive en perfecto equilibrio con el entorno no debería necesitar ningún tipo de prevención, pero en el caso de los cultivos de exterior es una tarea más ardua y por lo general recurrimos a insecticidas preventivos, y el neem es una verdadera estrella.
El aceite de neem, proviene de un árbol que lleva ese nombre y que crece en el subcontinente indio. De él se extrae este líquido amarillento-marrón que tiene múltiples beneficios, ya que es ligeramente selectivo sobre los organismos que son potencialmente dañinos, incluyendo algunas cepas del hongo oidio.
Cómo prepararlo
Lo primero es empezar trabajando con un litro de agua, para poder tener un control de la dosificación:
- Verter primero el agua en el pulverizador, debe estar tibia para ayudar a que el aceite se particule de forma correcta y logre integrarse a la mezcla.
- Si echamos primero el aceite, es posible que se quede una parte pegada a las paredes del recipiente ya que se trata de un aceite, y como tal no se mezcla bien con el agua.
- Utilizar con jabón potásico o jabón blanco de barra, esto emulsionará las pequeñas partículas de aceite y permitirá que toda la solución contenga la misma cantidad de aceite, es decir se vuelva homogénea
- Dejar enfriar el agua para usar la mezcla, ya que podemos dañar ciertas funciones de la hoja si lo hacemos con el agua tibia / caliente.
Cómo dosificar aceite de neem
El aceite de neem es muy sencillo de encontrar en tiendas especializadas o viveros. Podemos encontrarlo puro, donde es común que se vuelva sólido a temperaturas templadas (podemos volverlo líquido sumergiéndolo en agua tibia unos segundos) o bien mezclado con jabón potásico listo para usar:
- Para usar como preventivo, lo aplicamos cada 10 días a razón de 2ml por litro, junto con 5ml de jabón potásico.
- Para usarlo como tratamiento para plagas, usamos 4 a 6 ml por litro, junto con 10 a 15ml de jabón potásico.
- En el caso de los que ya vienen listos para usar, seguimos las instrucciones del envase.
Cómo y cuándo aplicar aceite de neem
La forma más usual de aplicarlo es de forma foliar tanto para prevenir como para combatir plagas. En cuanto a la frecuencia, puede hacerse sin problemas cada 7 días como preventivo y cada dos o tres días en caso de esta combatiendo una plaga.
Pero atención: si una plaga se vuelve resistente o muy recurrente, el problema esté seguramente en las condiciones ambientales: como la temperatura y la circulación del aire. Además de la salud integral de la planta a la que podemos ayudar con un buen sustrato y un riego adecuado.
La clave es no sólo aplicar el insecticida, sino también trabajar en mejorar integralmente nuestro cultivo.