La idea de comenzar a cultivar puede resultarnos muy atractiva, pero ponerla en práctica teniendo en cuenta las condiciones reales en las que nos encontramos es una de las partes que puede generarnos preguntas. Solemos deducir que para cultivar en exteriores necesitamos de un gran jardín, pero esto no tiene por qué ser así. Tener nuestras plantas de marihuana en terrazas y balcones también es una opción viable, solo hay que atenerse a una serie de sugerencias para que el cultivo rinda bien y sea tan exitoso como se desea.
Cultivar marihuana en terrazas y balcones
Se puede cultivar cannabis sin mayores problemas en estos espacios. Sin embargo, hay que prestar atención a algunas variables como las horas e intensidad del sol, la contaminación lumínica y el espacio a la hora de plantar.
¿Cuánto espacio necesita una planta de marihuana de exterior?
No importa si en nuestros hogares no tenemos un enorme lugar al aire libre, el cannabis puede adaptarse a la extensión que poseamos, por lo que, si contamos con un sitio angosto, podremos plantar igual. De todas formas, a la hora de cultivar marihuana en terrazas y balcones, es preciso intentar pasar desapercibidos. Aunque en la actualidad poseer plantas de marihuana no es ilegal si contamos con un permiso en Reprocann, tener nuestro cannabis expuesto puede traernos algunos inconvenientes.
Es por esto que lo ideal sería que tengamos en cuenta cuánto espacio ocupará nuestra planta dependiendo de la extensión de la que dispongamos. Si no contamos con mucho espacio a lo alto, podemos optar por una variedad índica, que no crece con la misma intensidad que otros tipos de planta. De todas formas, hay otras opciones para regular el tamaño del cannabis.
¿Cómo controlar la altura de nuestra planta?
Aunque queramos aprovechar el espacio al cien por ciento, en el cultivo de exterior muchas veces resulta necesario utilizar técnicas de control de altura. La opción más fácil es tener en cuenta el ciclo natural de cultivo. Podemos prever el tamaño al que llegará nuestra planta de marihuana si plantamos en base a la etapa de floración, que comienza entre fines de enero y llega hasta marzo.
Si bien casi siempre se planta el cannabis a mediados o principios de primavera, si lo que buscamos es que la planta tenga un tamaño más reducido podemos sembrar en diciembre, para evitar así que crezca demasiado.
Poda de follaje y raíces
Pero si ya comenzamos a cultivar y no nos percatamos del detalle del tamaño, podemos recurrir a la poda de follaje y raíces, que nos ayudará a moldear la planta de acuerdo a la dimensión que deseamos que ocupe. Si lo que queremos es disminuir un poco la altura de la planta, podemos podar desde los nudos de arriba. Pero si la planta ya tiene una altura importante y aún no estamos cerca de la etapa de floración, habrá que cortar más cerca de la base. Para esto, tendremos que podar desde el cuarto o quinto nudo contando desde la base.
Ahora bien, la poda de follaje se puede complementar con una poda de raíces, ya que la planta cuenta con menos tamaño y, por lo tanto, necesita menos nutrientes. Así, colocaremos el cannabis en una maceta de menor capacidad y con sustrato renovado.
Lo que debemos hacer es quitar la planta de su previo contenedor y colocarla en un lugar que esté desinfectado. Una vez hecho esto, cortaremos un 30% de la parte de abajo y de los costados de las raíces.
¿Cuántas horas de sol directo necesita la marihuana?
Cuando plantamos en exterior, tenemos que prestar atención a la cantidad de horas de luz solar directa que recibe nuestra planta al día. Esto tiene en cuenta aquellos momentos en los que los rayos solares dan plenamente en el cannabis.
La necesidad de energía solar va a depender de cada variedad de planta, por ejemplo, las sativas están preparadas para recibir mucha iluminación directa, mientras que las índicas pueden verse afectadas si se les da demasiada luminosidad.
Sin embargo, un promedio de 5 horas de sol directo sería lo adecuado en gran cantidad de los casos. Además, la ubicación de nuestro balcón o terraza también determinará cuanto tiempo de sol recibirá nuestra planta.
Contaminación lumínica en balcones
La marihuana necesita al menos 12 horas de oscuridad total para que la floración sea exitosa. Lamentablemente, muchas veces nuestro cultivo se ve afectado por la contaminación lumínica, es decir, cuando se supone que nuestra planta debe descansar de la luz, algunas fuentes de iluminación artificiales de la ciudad o de nuestras casas pueden caer sobre la marihuana.
Esta contaminación suele darse más que nada en los balcones, y es poco usual verlo en las terrazas. De todas formas, hay varias cosas que podemos hacer para evitar que este factor nos perjudique.
Si la contaminación viene desde nuestro hogar, con no prender las luces o utilizar una cortina durante las 12 horas de oscuridad que necesita el cannabis, ya lo habremos resuelto. Además, si nuestra planta no es de gran tamaño, podemos utilizar una caja para cubrirla, pero debemos procurar hacerle agujeros para que no se corte el flujo de aire.
Si la fuente de luz viene únicamente de arriba, existen techos corredizos que pueden solucionar nuestro problema. Eso sí, estos techos deberán removerse una vez terminadas las 12 horas de oscuridad.
Pero, aunque tengamos en cuenta todos estos tips, muchas veces la contaminación lumínica queda fuera de nuestro control. Aun así, existe otra alternativa. Lo que podemos hacer cuando sucede esto es utilizar una planta autofloreciente, pues este tipo de variantes no tienen en cuenta el fotoperiodo. Así, la luz solar y la contaminación lumínica no serán factores que deban preocuparnos a la hora de plantar.
¿Cómo sacar provecho al cultivo en balcones y terrazas?
Plantar marihuana en terrazas y balcones hará más viable la utilización de mediasombras e invernaderos, que pueden ser grandes aliados ante los inconvenientes que suelen surgir durante el cultivo, como las lluvias, que muchas veces traen consigo a los tan temidos hongos debido al exceso de humedad.
Además, las mediasombras sirven también para aquellos casos en los que el sol es demasiado fuerte para nuestra planta. Por lo tanto, estas dos alternativas son adecuadas tanto para el pleno verano, como para épocas del año en donde es más común que haya tormentas y humedad.
Algo importante a tener en cuenta también es el tutorado en el cultivo en exteriores, en especial si en nuestros balcones y terrazas corre mucho el viento. Atar la marihuana a un sostén evitará que las plantas se quiebren por el exceso de corrientes. Es importante que el tutorado se realice tiempo antes de la floración, ya que a medida que nos acercamos a esta etapa, la planta será más difícil de moldear.