Las plantas de marihuana pueden ser atacadas por diferentes tipos de organismos, como insectos, virus y hongos; estos últimos suelen ser los más letales. Tanto en cultivos de exterior como en indoor, los hongos pueden hacer un desastre sin solución. Pero el problema no termina ahí, ya que si hubo hongos en nuestro cultivo, sus esporas pueden permanecer latentes en la tierra, en otras plantas o en los restos esperando para atacar nuevamente.
Por eso es de suma importancia anticiparse al regreso de estos para que en caso de que nos hayan atacado, nuestro próximo cultivo llegue a buen puerto. A continuación presentaremos una guía completa de hongos para reconocer lo más comunes, prevenirlos y tratarlos.
Prevención general de hongos
Higiene y limpieza
Los tipos de hongos que atacan a las plantas de marihuana los podemos dividir en dos grandes grupos: aquellos hongos que atacan en en el follaje (como el oídio) y aquellos hongos que atacan en el sustrato (como el fusarium). Si bien algunas medidas de control son propias de cada especie, como veremos ahora, muchas técnicas sirven para el control general de todos estos tipos de organismos.
En primer lugar, debemos retirar la hojarasca y todos los restos de cultivos anteriores, ya que estos sirven de alojamiento para los insectos y las esporas de hongos. Si hubo una infección en el cultivo anterior, es necesario quemar los remanentes.
Es importante remover el suelo del lugar de cultivo. Esto expone al sol los insectos que pueden afectar el sistema radicular, mejora el drenaje, airea el suelo y previene su compactación.
Finalmente, debemos esterilizar las macetas y herramientas usadas en el cultivo luego de cada uso. Para esto podemos usar agua oxigenada de 10 vol pura o una solución con una parte de agua lavandina en nueve de agua. Estas medidas generales no solo nos ayudarán a prevenir ataques de hongos sino también de plagas comunes del cannabis como la araña roja, los trips o la mosca blanca.
Por otra parte, debemos controlar en cultivos de exterior las otras plantas del jardín, rociando con un preparado de cola de caballo todas las plantas para erradicar las esporas y hongos que pudiera haber en ellas.
Control del clima
Otra medida sumamente importante en la prevención de hongos es el control de la condiciones climáticas. En cultivos indoor es muy importante garantizar una buena circulación de aire y mantener la temperatura y humedad dentro de sus valores adecuados.
En cultivos de exterior se hace más difícil controlar los factores climáticos, sin embargo algunas medidas como la defoliación de las partes bajas ayudan a mejorar ostensiblemente la circulación de aire. Por otro lado, el uso de techos o invernáculos es muy útil para garantizar que las plantas no estén expuestas a condiciones climáticas hostiles. como fuertes lluvias, especialmente durante la floración.
Tipos de hongos que afectan al cannabis
A continuación vamos a hacer una lista de los hongos más comunes que afectan el cannabis poniendo el foco en sus condiciones de desarrollo, cómo prevenirlos y qué debemos hacer en caso de que los encontremos.
Botrytis: el hongo que arruina cosechas
La botrytis es uno de los hongos con mayor incidencia en los cultivos de cannabis, tanto en cultivos indoor como en cultivos de exterior. Ataca a los cogollos, especialmente a los de variedades índicas, ya que son más compactos. Se presenta cómo un moho blanco (o marrón) que comienza a crecer en el interior de los cogollos para luego salir a su exterior.
La germinación de las esporas de este hongo se produce cuando el tejido vegetal está húmedo y la temperatura ronda los 21 °C, por eso aparece cerca de la temporada de cosecha en exterior, cuando la temperatura baja un poco y las lluvias aumentan.
Prevención y tratamiento
Es importante tratar de evitar que los cogollos se mojen durante la floración avanzada. Por eso en exterior, recomendamos el uso de invernáculos o techos. En caso de que se mojen, conviene sacudir las plantas o ayudarnos con un ventilador para optimizar el secado.
Por otro lado, también podemos usar como preventivo aceite de neem y preparado de cola de caballo con cuidado de no mojar sobremanera los cogollos. La identificación temprana es fundamental para evitar su expansión, por eso podemos abrir los cogollos manualmente para ver si tienen un principio de botrytis.
Si detectamos botrytis, debemos cortar por debajo de la parte afectada para evitar que se expanda. Lo ideal es cubrir las ramas con botrytis con una bolsa antes de cortarlas para impedir que las esporas se diseminen durante el proceso. No debemos dejar que entren en contacto con otras plantas, ya que al menor roce pueden contagiar la infección. Por otra parte, el uso de propóleo luego de remover las partes afectadas es fundamental para mantener márgenes de seguridad.
Fusarium: un hongo letal
El fusarium es un hongo que se encuentra en el suelo y resulta letal para las plantas de marihuana. Por otro lado, sus esporas pueden quedar en el suelo por mucho tiempo, lo que lo hace muy difícil de erradicar.
El fusarium de raíz ataca a las plantas luego de abundantes lluvias (o mucho riego), cuando el sustrato es compacto y no permite un adecuado drenaje. La planta afectada presenta un amarronamiento en el tallo a la altura del suelo. El sistema radicular adquiere una tonalidad amarronada; la planta se seca y se muere
Dependiendo de la cepa de fusarium, este hongo puede presentarse en cualquier momento del año.
Prevención y tratamiento
Inocular trichodermas en el medio de cultivo es fundamental para evitar este tipo de hongos. Estas son microorganismos benéficos que colonizan el sustrato muy rápido, por lo que dejan sin espacio a organismos patógenos para su desarrollo. Es importante también realizar un riego adecuado y contar con buen drenaje.
Cuando el fusarium infectó una planta es muy difícil de tratar. Por eso debemos sacar las plantas afectadas, tirar esa tierra para evitar futuras infecciones y lavar bien las macetas con lavandina. Para erradicar el hongo del suelo de un jardín se puede tratar mediante solarización y encalado.
Oídio/ Mildiu: un hongo muy habitual
El oídio se presentar en forma de polvo blanco sobre la superficie de las hojas. El mildiu en cambio se presenta en el envés de las hojas. Afectan especialmente las hojas que se encuentran a la sombra y con poca ventilación. Perjudican la fotosíntesis, reduciendo la producción. Si no se controlan, puede expandirse a las ramas y cogollos.
Aparece especialmente con temperaturas y humedad moderadas. También puede darse después de lluvias.
Prevención y tratamiento
El uso del preparado de cola de caballo y aceite de neem sirve para prevenir estos hongos. Por otra parte, debemos poner las plantas con buena distancia entre sí, ya que la ventilación ayuda a evitar la condensación de humedad.
En general el daño causado por este tipo de hongos no suele ser muy grave, pero si la planta de marihuana se infecta durante una fase temprana o a comienzos de floración, el daño puede llegar a ser mucho más considerable. Debemos retirar las hojas dañadas, así evitaremos que el hongo se expanda al resto de la planta. Luego debemos pulverizar a la planta por completo con propóleo o el preparado de cola de caballo.
Pythium: el hongo que pudre las raíces
El pythium es otro hongo que ataca al sistema radicular, generando pudrición y en consecuencia la muerte de la planta. Ataca generalmente plantas pequeñas o mal nutridas.
Es un hongo que se desarrolla muy rápido bajo condiciones favorables: alta humedad ambiental y un sustrato con mal drenaje, compacto y poco contenido de oxígeno. Coloniza el sistema radicular y la planta de cannabis se ve privada de nutrientes.
El follaje se vuelve amarillo y los bordes de las hojas pueden amarronarse. A medida que avanza la infección, el desarrollo se estanca y la planta entera puede marchitarse.
Prevención y tratamiento
Para evitar una infección de este hongo es fundamental mantener plantas saludables, sin carencias o ataques de plagas. Un sustrato con buen drenaje, aireado y vida microbiana benéfica mantiene un sistema radicular fuerte y con buena salud.
En caso de detectar una planta con pythium, debemos retirarla del lugar del cultivo y al igual que en el caso del fusarium, no debemos usar esa tierra para futuros cultivos.
No se deben consumir cogollos con hongos
Como hemos visto a lo largo de esta nota, las causa de por qué salen hongos en las plantas de la marihuana son varias. Sin embargo, los recursos para prevenirlos también son muchos y si cultivamos a conciencia es poco probable que aparezcan y, en caso de que así ocurra, sabremos qué hacer para evitar que el daño sea mayor.
Es importante destacar, que algunos hongo también pueden presentarse luego de la cosecha, durante el secado e incluso encontrar hongos cuando los cogollos ya están en frascos. Por lo tanto debemos estar atentos durante todo el secado a la aparición de hongos, como botrytis, para separar las partes afectadas ni bien se presenten.
A su vez, luego de enfrascar, si notamos mucho olor a humedad, podemos abrir los frascos a diario y en caso de considerar necesario, retirar los cogollos del frasco y ponerlos en una caja de cartón para que continúen secándose.
Los hongos pueden contener micotoxinas que resulten dañinas para la salud. En ese sentido, fumar cogollos con oídio o botrytis, por ejemplo, es una pésima idea que puede hacernos mucho daño. Sin embargo, las partes que no hayan sido afectadas las podemos usar sin mayores inconvenientes.
Finalmente, las plantas afectadas por hongos de raíz, como el fusarium, deben eliminarse del cultivo y no son aptas para consumo humano.