Diminutas, inteligentes y organizadas. Las hormigas pueden convertirse en una plaga devastadora capaz de arrasar en tiempo record un cultivo completo. En esta nota te explicamos cómo combatirlas con las técnicas más eficaces y seguras.
Cuando la humedad empieza a aumentar, las hormigas están más activas. Y hay que prestar atención para que nuestras plantas no se transformen en su alimento.
La mejor alternativa es orgánica. Se trata de la tierra de diatomeas. Es un insecticida natural que funciona cuando entra en contacto directo con las hormigas. Su apariencia es similar al talco, se trata de algas fosilizadas y no es tóxica para personas ni animales.
Tierra de diatomeas para combatir hormigas
Usarla es muy fácil. Se puede aplicar directamente sobre el sustrato o de manera foliar incluso cuando nuestras plantas están floradas.
Si queremos aplicarla directamente sobre el sustrato, esparcimos el polvo sobre la base de la maceta o tierra, intentando hacer una fina capa que cubra todo, para que a las hormigas les sea prácticamente imposible caminar.
Si queremos reforzar con una aplicación foliar, podemos espolvorearla directamente sobre las plantas o usando un rociador (una cucharada sopera por litro de agua). Recordá que la tierra de diatomeas se lava con la lluvia así que, en caso de necesitarlo, habrá que reaplicarla.
Cómo combatir pulgones y cochinillas
Para erradicar los insectos favoritos de las hormigas se pueden emplear productos naturales, como el jabón potásico en combinación con el aceite de neem (10 ml de jabón con 15 ml de neem en un litro de agua, pulverizar semanalmente la planta entera).
Si la infección se fue de las manos, se puede combinar aceite mineral con algún plaguicida en base a abamectina, reduciendo la dosis mínima de aplicación a la mitad para no quemar las plantas. Los plaguicidas de síntesis química no deben ser aplicados entrada la floración.
Tampoco hay que aplicar los plaguicidas naturales durante el día para evitar matar insectos benéficos, como las abejas, las mantis religiosas o las mariquitas que se alimentan de las plagas.
Cómo repeler y prevenir ataques de hormigas
Para repeler a las hormigas se puede emplear canela en polvo espolvoreada sobre la superficie del sustrato o alrededor de las plantas del jardín. Para tratar las plantas, diluir dos cucharadas soperas de canela en polvo en 3,5 litros de agua caliente, dejar enfriar y pulverizar.
Para delimitar un perímetro se puede hacer una barrera de tierra de diatomeas en el sustrato o suelo, hay que reaplicar luego de la lluvia o el riego.
Para atacarlas de forma natural se puede colocar arroz partido para que las hormigas se lleven al hormiguero. Este arruina al hongo del que se alimentan, no mata la colonia, y a veces puede no matar el patógeno. Para suprimir las hormigas se recurre a un hormiguicida químico.