Doctor en Bioquímica por la Universidad de Berkeley, especializado en farmacología y psiquiatría, su bagaje intelectual y su carrera profesional es de las grandes ligas. Tras ocupar el cargo de director de investigación en los laboratorios Bio Rad, Alexander “Sasha” Shulgin pasó una década en Dow Chemical donde, entre otras cosas, desarrolló el Zectran, el primer pesticida biodegradable. Pero su obra más conocida es el 3,4-metilendioximetanfetamina, en palabras más sencillas: el MDMA. Conocido popularmente como Éxtasis.
Sasha no trabajó sólo en su búsqueda. Su esposa Ann fue su compañera inseparable. Ella utilizó durante muchos años el MDMA y otras sustancias afines en psicoterapia. Mientras charlamos, se asoma a la puerta del living cuando el tema de conversación le interesa. “Cuando tomás por primera vez psicodélicos te reencontrás con los sentimientos de cuando eras niño”, suma. “Los niños tienen mentes psicodélicas. No necesitan drogas, son así de manera natural. Los psicodélicos te devuelven la visión que tenías antes de convertirte a la racionalidad y a la lógica”.
En la vida de ambos existe un antes y un después de la primera experiencia psicodélica. “Una persona me sugirió que probara la mescalina y lo hice –recuerda Sasha Shulgin–. Esa experiencia cambió completamente mi dirección. A partir de entonces quise dedicarme a encontrar sustancias similares a la mescalina. Han pasado 50 años y todavía sigo trabajando en ello”.
“Cuando tomás por primera vez psicodélicos te reencontrás con los sentimientos de cuando eras niño. Los niños tienen mentes psicodélicas. No necesitan drogas, son así de manera natural.”
De entre todas las sustancias que investigó, el MDMA se convirtió en el psicodélico más consumido en el mundo. “Si lo disfrutan, me siento feliz”, dice Alexander Shulgin acerca del éxito de la sustancia. Después de eso calla, desvía la mirada y Ann, interpretando el silencio de su compañero, matiza: “Tenemos sentimientos contradictorios…”.
¿Por qué le interesó esta sustancia en particular?
Porque nunca había sido ensayada en seres humanos. La probé, la encontré interesante, lo publiqué y luego fui por otras cosas. Mi arte es inventar nuevas sustancias, no explorar y perseguir las ya conocidas.
¿Por qué motivo cree que se ha vuelto tan popular el MDMA?
Quizá sea porque combina una no muy fuerte acción psicodélica con cierta capacidad estimulante, aunque no es un estimulante en la misma manera en que lo son la metanfetamina y la cocaína.
Hay muchas otras sustancias similares al MDMA, ¿haciendo una pequeña variación en la molécula, se consigue un compuesto diferente?
Diferente sustancia, diferentes propiedades, diferente respuesta. Las que yo he perseguido fundamentalmente han sido aquellas sustancias que se vuelven psicodélicas, que sigue siendo mi dirección favorita. Si se transforman en sustancias calmantes, hipnóticas u otras propiedades por las que no siento interés, abandono ese camino y sigo con cambios que enfaticen la naturaleza psicodélica.
Lecciones psicodélicas
Un gran ventanal abre el salón hacia las magníficas vistas del valle. En el horizonte se recorta contra el cielo azul el Monte Diablo, cuya silueta sirvió para ilustrar la portada de dos libros de referencia en la psicodelia mundial, Pihkal y Tihkal, escritos a cuatro manos por Ann y Sasha. El primero narra la historia de amor y conocimiento psicodélico que viven Shura y Alice, trasposición literaria de Sasha y Ann Shulgin. El segundo volumen constituye un valioso manual técnico que explica la composición de más de 200 sustancias psicodélicas –casi todas inventadas por Sasha–, así como también métodos de manufactura, dosis activas en humanos y comentarios de usuarios.
Los psicodélicos despertaron en mí una gran curiosidad para seguir la dirección que hoy en día aún sigo. Y me han recompensado continuamente.
Sasha ha recorrido personalmente los cientos de caminos químicos que ha descrito en sus libros. Los ensayos clínicos –que él bautizó como bioensayos– los realizaba en su propio organismo, en el de su esposa Ann y en los de varios amigos psiconautas con deseos de surcar territorios ignotos.
¿Tiene alguna sustancia favorita?
Intento no tener sustancias favoritas porque caería en el hábito de usarlas y nunca uso el mismo material una y otra vez. Pero me gusta mucho el 2-CB. Un material delicioso.
¿Puede explicar cuáles son los efectos producidos por el 2-CB?
Es de corta duración. No se prolonga más allá de tres o cuatro horas. Una pequeña dosis provoca efectos muy potentes, por lo que hay que tener mucho cuidado y saber cuál es el nivel activo. Produce una sensación extremadamente confortable, muy cariñosa, muy visual y extremadamente erótica. Hay sustancias como el MDMA que llevan al amor y la comunicación.
¿Alguna vez encontró en sus investigaciones una sustancia que llevara al odio y a la incomunicación?
En general, este tipo de sustancias psicodélicas hacen comprender a la gente su propia personalidad interior y su actitud hacia el mundo. Si la persona que las consume es alguien que odia a los demás, y a las cosas en general, algunas de estas sustancias le harían odiar más y le darían más autoridad, más libertad para hacer lo que eligiera. Así que pienso que los fondos de las distintas personas, sus preferencias y sus aversiones, la imagen que tienen de su propia personalidad y sus actitudes hacia los demás, podrían muy bien ser fortalecidas. Así que la respuesta a tu pregunta es sí, podrías aumentar la cantidad de destrucción social con estas sustancias.
¿Pero qué ocurre con las cosas que se encuentran durante el viaje, ¿pueden esos hallazgos cambiarnos la vida?
Eso depende de ti. Si leés un libro interesante, asistís a un curso interesante o conocés a una persona interesante, ¿podría eso cambiar tu vida? Por supuesto. No es diferente a cualquier otra exposición a cosas en este mundo que puedas haber vivido. Yo me he cruzado en mi vida con libros en los que dos frases en una página me cambiaron. Nunca había tenido ese concepto antes y desde entonces está conmigo para siempre. Eso me cambió definitivamente.
¿Cuál es la lección más importante que le han dado los psicodélicos?
Despertaron en mí una gran curiosidad para seguir la dirección que hoy en día aún sigo. Y me han recompensado continuamente. No todo es agradable, pero es todo desconocido, todo nuevo y es siempre una nueva experiencia.
¿Cada vez es una nueva experiencia?
Sí, puesto que cada droga es nueva. ¿Es cada fruta igual? No. Pero todas tienen una cierta dulzura, porque si no, no estarían en el plato. Si encontrás una que es amarga o agria, pues no hay que usarla. Si encontrás cosas negativas, las echás a un lado: ese no es el camino a seguir.
Esta nota se publicó en la Revista THC 104, si querés más info sobre el contenido de esa edición hace click.