La epilepsia es una alteración de la actividad eléctrica cerebral que afecta a unas 50 millones de personas y se caracteriza por convulsiones recurrentes.
En el 30% de esas personas las crisis se repiten a pesar de la medicación, lo que se conoce como “epilepsia refractaria”. Las crisis epilépticas son episodios de inicio y terminación bruscos producidos por un cambio repentino de la actividad eléctrica del cerebro. Se pueden presentar como convulsiones, ausencias, alucinaciones, etc.
Las convulsiones son crisis de movimientos musculares involuntarios que afectan a todo el cuerpo o a una parte, con o sin pérdida de la conciencia.
La frecuencia, la duración de la crisis, el tiempo de recuperación y el nivel de deterioro cognitivo producido varían en cada caso. Una crisis severa puede llevar al deceso.
Tratamiento tradicional
Se basa en la administración de fármacos antiepilépticos que en casos refractarios no logran revertir los síntomas. Dadas las altas dosis indicadas, es frecuente la aparición de efectos secundarios.
Existen estrategias no farmacológicas, como la dieta cetógena, cirugías e implantes específicos.
Tratamiento con Cannabis
Se estima que el sistema endocannabinoide es clave en el control de la excitabilidad de la red neuronal, lo que limitaría la actividad eléctrica anormal.
Los cannabinoides disminuirían la inflamación y el estrés oxidativo que propagan el daño neuronal post crisis, disminuyendo el déficit cognitivo. El CBD demostró potencial anticonvulsivante y el control de crisis con THC fue descripto hace años.
Hay estudios sobre la capacidad antiepiléptica del CBDV, THCV, CBN y del THCA a bajas dosis. Muchas personas responden mejor a extractos artesanales que a productos de CBD puro, dada la sinergia de los componentes.
Los usuarios reportan mayor conexión con el entorno, mejoría en el estado de ánimo, disminución del número e intensidad de las crisis, menor tiempo de recuperación y la posibilidad de disminuir las dosis de los fármacos antiepilépticos.
INTERACCIONES
Fármacos que aumentan su duración y efecto en combinación con CBD: fenitoína, clobazam, etosuximida, lamotrigina, topiramato, tiagabina, zonisamida, felbamato, entre otros antiepilépticos, lo que requiere seguimiento clínico para corregir las dosis. Fármacos que disminuyen el efecto del THC: fenobarbital, fenitoína y carbamazepina.
CUIDADOS GENERALES
> Es importante recordar que el cannabis debe emplearse como fitoterapia complementaria y no como reemplazo del tratamiento. > Su uso debe supervisarse por un médico y un familiar. > Se aconseja llevar un registro de efectos inmediatos y a largo plazo. > El modo de administración influye en los efectos y su duración. > Deben ser especialmente precavidos los adultos mayores y quienes tienen antecedentes cardiovasculares, hepáticos, renales o psiquiátricos. > Las flores deben estar libres de hongos y agroquímicos. > Los extractos no deben contener alcohol ni contaminantes.
Podés leer más sobre cannabis medicinal y Epilepsia refractaria en Revista THC 107.