Las personas que padecen dolores crónicos prefieren cannabis para tratarlo. Es lo que muestra un estudio realizado por profesionales de la Berkeley, California.
Los investigadores consultaron a 2800 usuarios de cannabis medicinal. De ellos un poco más de 800 respondieron que, además, utilizaron algún tipo de derivado del opio en el último semestre. Dentro de ese grupo el 97% aseguró que redujeron considerablemente las dosis de opiaceos al incorporar cannabis en sus tratamientos. No es un dato menor si se tiene en cuenta que el 87% destacó sentir efectos adversos por el consumo de los fármacos derivados del opio, como la constipación y las náuseas.
Más allá de estos efectos colaterales que pueden considerarse menores, alrededor de 100 personas mueren por día en los Estados Unidos por sobredosis de opiacios resetados según el Centro de para el Control y Prevención de Enfermedades de ese país.
“Este estudio puede ayudarnos a concluir que los pacientes que usan cannabis medicinal reportan un uso exitoso del cannabis junto o como sustituto de la medicación basada en opiaceos en el tratamiento del dolor”, sostienen los investigadores.
El estudio completo puede leerse aquí:
http://online.liebertpub.com/doi/full/10.1089/can.2017.0012