Hay muchas formas de usar el cannabis. Sin duda, la más popular es fumándolo. Pero para inhalar los compuestos activos de la planta hay muchas alternativas. Algunas de ellas son las pipas, bongs, vaporizadores y rigs.
Fumar es una práctica que conlleva sus riesgos y siempre es importante tenerlo en cuenta. El problema no proviene del cannabis en sí, sino de la combustión.
Por esa razón algunas personas eligen otras formas de incorporar el humo del cannabis. Hagamos un breve repaso por las diferentes opciones.
Pipas
Muchísimo antes de la invención del cigarrillo, tanto el tabaco como el cannabis, y otras plantas se usaban en pipas.
Siguen siendo fundamentales para quienes no dominan el arte de armar.
El diseño es uno de los más antiguos de la humanidad y ha sufrido pocos cambios: un hornillo donde se quema la materia vegetal, un tubo que hace las veces de chimenea y conduce el humo hasta la boquilla donde posamos los labios.
Dependiendo el tamaño y la función se llaman de distintas formas: existen las pipas de “combustión interna” o turbinas, cuya tapa genera que emitan la menor cantidad de humo entre pitada y pitada.
Las pipas las más apropiadas para el cannabis son las de vidrio pirex o borosilicato, ya que son inalterables por la temperatura de la combustión
Otras cuya forma camuflada en otros objetos o que poseen una cazuela para pequeñas cantidades son conocidas como “one hitter” o pipas de una seca.
Están construidas en infinidad de materiales, siendo las más apropiadas para el cannabis las de vidrio pirex o borosilicato, ya que son inalterables por la temperatura de la combustión, no liberan sabores extraños y permiten una limpieza profunda.
Es importante destacar que en su gran mayoría no poseen sistemas de filtración, por lo que pueden generar humo más caliente y liberar mayor cantidad de ceniza y otros subproductos.
Mantenerlas limpias es fundamental para apreciar el verdadero sabor y aroma del cannabis.
Pipas de agua y bongs
Las pipas de agua y los bongs funcionan bajo el mismo concepto básico: filtran el humo a través de agua, lo que reduce las partículas en suspensión del humo como alquitrán, ceniza y otros compuestos producidos por la combustión.
Los bongs poseen una boquilla amplia y son capaces de administrar una enorme cantidad de humo con pequeñas bocanadas
Las pipas de agua suelen tener boquillas como las pipas comunes. Los bongs, inspirados en las pipas tradicionales tailandesas, poseen una boquilla amplia y son capaces de administrar una enorme cantidad de humo con pequeñas bocanadas.
Vaporizadores
Los vaporizadores no queman el cannabis sino que al calentar la materia vegetal evaporan la resina creando un vapor que contiene los principios activos.
Hay diferentes dispositivos. Pueden ser a convección, es decir que calientan el aire alrededor de la materia vegetal, o a conducción, calentando la materia vegetal en una cazuela o hornillo.
Los vaporizadores son lo más recomendado usuarios medicinales: garantizan la ausencia de los subproductos que emite la combustión de materia vegetal
Son los dispositivos para cannabis inhalado recomendados para los usuarios medicinales y para quienes buscan dejar de fumar, ya que garantizan la ausencia de los subproductos que emite la combustión de materia vegetal.
Rigs
La popularización de las extracciones como wax, dab o rosin también generó la creación de piezas especiales para calentar y evaporar estos productos, conocidas como rigs.
Funcionan de la misma manera que un bong con la diferencia fundamental ubicada en la cazuela y el sistema de filtración.
Los rigs son la herramienta para el uso de extracciones, funcionan como un bong con la diferencia fundamental ubicada en la cazuela y el sistema de filtración
Los extractos son sometidos a temperaturas mucho más altas que las flores y los diseños de estas cazuelas maximizan la difusión pareja del calor.
A diferencia de las pipas y bongs que pueden tener un pequeño filtro de metal, los rigs poseen una pieza conocida como nail que puede estar elaborada en materiales como vidrio, titanio o incluso cuarzo.