El boom del cannabis legal en Estados Unidos -ya sea para fines medicinales o todos sus usos- y la proliferación de un número cada vez mayor de productores trajo aparejado una considerable merma en los precios.
El ejemplo más claro se observa en Colorado, donde desde enero de 2014 -cuando comenzó la venta legal de marihuana en dispensarios en ese estado- hasta la fecha el valor del cannabis ha caído un 48%, según datos de la consultora Cannabase.
La cantidad de cultivos comerciales permitidos y de negocios que venden cannabis está en crecimiento, lo que disminuye el precio mayorista y, por ende, el minorista. En ese sentido, Troy Dayton, director general del consorcio de inversores en marihuana, manifestó: “Cualquier persona que esté invirtiendo en este sector o que esté pensando en iniciar un negocio en este sector, debe hacerlo sabiendo que el precio del cannabis va a caer en picada”.
Mientras los productores buscan la manera de reducir costos, en Colorado el promedio del valor del gramo de cannabis es de 6,61 dólares, un 25% menos que durante el primer trimestre de 2014, según la consultora BDS Analytics.