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Implementar con urgencia el Registro Nacional para cultivo medicinal, ese es el pedido de gran parte de la sociedad civil en los últimos meses. Y ahora, un grupo de organizaciones, inició una acción colectiva para hacer visible la necesidad de avanzar sin más demoras.
En noviembre pasado se anunció la nueva reglamentación para le Ley de Cannabis Medicinal. Entre varias modificaciones clave, se garantizó el derecho al cultivo personal, solidario y colectivo de cannabis terapéutico.
El decreto reglamentario 883/2020 dejaba en claro que para acceder a ese derecho las personas deberían incribirse en un Registro Nacional, en concreto en el Registro del Programa de Cannabis (ReProCann).
Hubo algunas reuniones a poco tiempo de anunciada la nueva reglamentación, trabajo al que se sumó a una serie de organizaciones sociales dentro de un Consejo Consultivo Honorario (CCH). Desde allí se comenzaron a hacer aportes para efectivizar la ley.
De hecho, las organizaciones civiles que participaron del CCH hicieron un balance positivo del proceso que tuvo como resultado la nueva reglamentación.
Sin embargo, a más de 3 meses de ese anuncio, el Ministerio de Salud de la Nación aún no ha puesto en marcha esa herramienta. En consecuencia, miles de personas para quienes se previó una protección legal, se encuentran expuestas a allanamientos y causas penales.
Es importante recordar que la Ley de Drogas (23.737) aún sigue vigente y que, incluso existiendo un Registro, seguirá pensando sobre quienes cultivan cannabis y no son usuarios medicinales.
Más cultivos, más necesidades
“Desde el anuncio de la nueva reglamentación se generó un clima de confianza y mucha gente que durante años no había accedido a tener una mejor calidad por temor empezó a cultivar”, explica Valeria Salech, presidenta de Mamá Cultiva Argentina.
Sin embargo, aclara que las demoras en la implementación del Registro “esa gente siente incertidumbre y teme que este recorrido que emprendieron no termine bien, porque se sienten indefensas”.
Respecto a las características que tendría el Registo, el Ministerio de Salud había dado algunos adelantos. Para Salech la propuesta hecha por el Ministerio era buena. “Creemos que el proceso para registrarse tiene que ser muy sencillo, la aplicación Cuidar es un excelente ejemplo de cómo se podría hacer, confiamos que puede salir bien, el tema es que ha sido mucho la demora”, señala.
La acción colectiva
Para avanzar en la inmediata implementación del ReProCann, un grupo de organizaciones civiles que forman parte del CCH iniciaron una acción colectiva.
La fecha límite para sumarse es el 26 de febrero: pueden hacerlo tanto organizaciones como cualquier persona física. El objetivo es entregar esta solicitada al Ministerio de Salud de la Nación durante la primer semana de marzo.
Acá puede leerse el texto completo y a continuación el link para sumarse.
POR LA INMEDIATA IMPLEMENTACIÓN DEL REGISTRO DEL PROGRAMA DE CANNABIS (REPROCANN)
Las organizaciones y personas abajo firmantes, en nuestro rol de usuarias, productoras y cultivadoras de cannabis terapéutico, solicitamos la inmediata implementación del Registro del Programa de Cannabis (ReProCann) que reglamenta el Art. 8 de la ley 27.350 y su decreto reglamentario 883/2020.
Actualmente vemos cómo avanzan grandes proyectos de investigación y se firman acuerdos para futuros cultivos que abastecerán la demanda, mientras quienes cultivamos desde hace años para nuestra salud, la salud de algún ser querido o para integrantes de nuestra comunidad, seguimos arriesgando nuestra libertad, expuestas y expuestos a detenciones arbitrarias y la pérdida de nuestra materia prima sumada a la interrupción de nuestros tratamientos, debido a la demora en la implementación del registro que nos permitirá quedar bajo la legislación vigente.
Entendemos que la implementación del ReProCann es la herramienta para minimizar los estragos que genera desde hace treinta años la Ley 23.737 de drogas. Por esto creemos que es menester atender con urgencia las necesidades individuales y asociativas de la sociedad civil.
Acompañamos con nuestras mejores intenciones el advenimiento de cultivos estatales y la producción de una planta tan noble como el cannabis, sin embargo creemos que es imprescindible comenzar desde abajo, regulando el acceso verdadero.
Somos una comunidad organizada reclamando por el reconocimiento de nuestro legítimo derecho a la salud.