Las bebidas infusionadas con cannabis son una de las grandes joyas de la industria cannábica legal. Jugos, gaseosas y cervezas. Pero ahora, la famosa región francesa de burdeos comenzó a producir vino cannábico.
Así, por primera vez, se inicia un proceso de este tipo en una de las zonas vitivinícolas más importantes del mundo. En un inicio, las infusiones se realizará con CBD. Lo presentan como un “un vino de entrante divertido”.
“A los efectos clásicos del alcohol se le suma un relajante”, explica Raphaël De Pablo quien se formó en Canadá y está al frente de la iniciativa Burdi W.
Vino sí, vino no
Las denominaciones de origen y al defensa de las identidades de los productos, son una característica fuerte en la industria vitivinícola. Por eso, al sumarle CBD jurídicamente el producto deja de ser vino pasa a ser “una bebida aromatizada a base de vino”.
Es la primera vez que la famosa región vitivinícola de Burdeos producirá vino infusionado con cannabis
Para realizarlo se utilizan flores de cáñamo cultivado en Francia. De hecho, hay tensiones legales, dado que la ley francesa solo autoriza el cultivo y comercialización de las fibras y los granos del cáñamo. Mientras que la explotación de las hojas y las flores de la planta está prohibida.
Sin embargo, un fallo de fines del año pasado del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), declaró que la prohibición francesa del CBD es ilegal.
En Francia el CBD es un boom: hay alrededor de 400 locales especializados. En ellos se pueden encontrar desde aceites para uso terapéutico hasta comidas.
Bien embotellado
De Pablo mantiene en secreto el proceso de producción de Burdi W. Lo que se sabe es que en cada botella se mezclan 250 miligramos de CBD con uvas locales de Burdeos “petit verdot”. El resultado: una combinación de notas de uva negra con las del cannabis.
En cada botella se mezclan 250 miligramos de CBD con uvas locales de Burdeos “petit verdot”. El resultado: una combinación de notas de uva negra con las del cannabis.
Las botellas se pueden conseguir en una plataforma de financiación participativa a 34 euros cda una. Hasta ahora, Burdi W vendió 10.500 botellas.
De Pablo aclara que la mayoría de los pedidos son del extranjero, y señala claramente con quién compite: los vinos infusionados de California que por ahora se mantienen en precios mucho más elevados.
Un ejemplo más de que el cannabis es una de las grandes posibilidades industriales de los años por venir.
De hechp, según el informe publicado por la consultora de cannabis Prohibition Partners, el mercado mundial de bebidas a base de cannabis tendrá un valor de 1.820 millones de dólares a finales del 2020. Para el año 2024, estiman que será de 5.800 millones de dólares.
El desafío es que esos avances de la industria vayan de la mano de regulaciones integrales que dejen atrás las leyes prohibicionistas
Este veloz crecimiento explicaría por qué Constellation Brands (una de las empresas más grandes de bebidas en los Estados Unidos) invirtió 4.000 millones de dólares en comprar acciones en Canopy Group. Sumado a esto, Coca-Cola y PepsiCo declararon el interés en producir infusiones con marihuana.
El desafío: que esos avances millonarios vayan de la mano de regulaciones integrales que dejen atrás las leyes prohibicionistas que siguen encarcelando a millones de usuarias y usuarios en todo el mundo.