Con abril llega la temporada de cosecha en exterior. Cortamos las plantas y empieza otro trabajo. Y entre esas acciones es importante saber cómo manicurar y mejorar tus flores.
Se conoce como “manicurado” la práctica de quitar las hojas sin resina a las flores de marihuana, un proceso que se realiza antes del secado y curado.
Para qué lo hacemos
De esta manera se reduce la materia vegetal y la humedad en el ambiente de secado y además eliminamos hojas innecesarias en nuestras flores.
A la hora de usarlas, los cogollos tendrán un sabor más puro y claro, sin el sabor a hoja y clorofila que poseen las hojas grandes y medianas.
Es también el momento ideal para realizar una cuidadosa inspección a las flores para detectar rastros de mohos, hongos y plagas, pelos de mascotas o semillas y hojas de otras plantas si cultivamos en exterior.
Cuándo y cómo
La manicura se puede realizar con las flores frescas o secas, depende el gusto personal, el clima y el tamaño de la cosecha.
En cosechas de muchas plantas o de gran tamaño, este proceso puede realizarse en varias etapas mientras las ramas están colgadas para evitar que los cogollos se aplasten o enmohezcan.
Al momento de cosechar una planta, se puede remover previamente todas las hojas grandes cuyo peciolo (el “palito” que las une al tallo o rama) asoma debajo de las flores.
Manicura gruesa
La manicura “gruesa” ahorra espacio y pueden usarse estas hojas para el compost ya que en su mayoría no poseen poco contenido activo.
Una vez separada la planta en ramas manejables, comienza el trabajo retirando las hojas medianas que están un poco más cerca de los cogollos.
Es fundamental usar una tijera de punta fina, limpia y afilada y realizar esta tarea en una posición cómoda y con buena iluminación.
Manicura fina
A continuación se remueven las hojas más pequeñas y las puntas de aquellas que crecen entre los grupos de cálices y su peciolo es menos visible.
Esta manicura fina es opcional y puede realizarse también unos días después de iniciado el secado, cuando las flores reducen su volumen y los peciolos son más accesibles.
Dado que retirar materia vegetal de las flores puede variar la velocidad del secado, podemos adaptar este proceso a nuestras condiciones climáticas, retirando la mayor cantidad posible de hojas si el clima es muy húmedo y viceversa cuando el secado es muy veloz.
Con las hojas pequeñas que tengan resina pueden realizarse todo tipo de extracciones, recetas de cocina y cremas o lociones para uso tópico.
Simplemente debemos conservarlas en buen estado hasta que sea el momento de usarlas. Así podés mejorar tus flores.
