Skip to content Skip to sidebar Skip to footer
Cannava

Jujuy: en junio inaugurarían el primer laboratorio nacional para la producción de semillas

Esta semana, Argentina dio uno de los avances más grandes hasta el momento para la industria cannábica: la habilitación del registro e inscripción de las semillas nacionales. Ahora Cannava, la empresa estatal de la provincia de Jujuy, proyecta inaugurar en los próximos dos meses el primer laboratorio nacional para la elaboración de semillas 100% nacionales.

“Esta resolución abre una puerta más que interesante”, asegura a THC Gastón Morales, Presidente de Cannava sobre la resolución firmada por los ministerios nacionales de Salud y de Agricultura, Ganadería y Pesca, con participación del Instituto Nacional de la Semilla (INASE).

“Estamos convencidos de que la soberanía tecnológica para la producción de cannabis medicinal depende de la semilla. Tener semillas propias es lo que te da autonomía, sostenibilidad e independencia económica”, sostiene.

Plan de mejoramiento

“Los objetivos específicos del programa de mejoramiento genético tienen que ver con multiplicar las variedades de cannabis adquiridas por Cannava que hayan demostrado buen comportamiento y adaptación a los sistemas de producción local y llevar adelante la reproducción de nuevas variedades”, cuenta Morales.

“La soberanía tecnológica para la producción de cannabis medicinal depende de la semilla. Tener semillas propias es lo que te da autonomía, sostenibilidad e independencia económica”, sostienen desde la empresa estatal jujeña.

Para comenzar con el desarrollo de las semillas, Morales cuenta que “se espera para junio la llegada de los equipos que van a conformar la planta farmacéutica que tiene unos 600 metros cuadrados, que además ya tiene el visto bueno de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT)”.

“La planta va a contar con clasificación de áreas, distribución de zonas, definiciones de la línea productiva”, detalla el Presidente de Cannava sobre el predio de mejoramiento genético que estará a la altura productiva de los laboratorios instalados hace años en Colombia.

“Estamos en pleno proceso de la implementación de la infraestructura agrícola, científica y tecnológica: laboratorios y salas de germinación. Una vez concluida la etapa, se larga el procedimiento de mejoramiento genético”, adelanta Morales.

Nacionalización de genéticas

Si bien Cannava pretende elaborar semillas puramente nacionales, la compañía de Jujuy comenzará el mejoramiento genético de las variedades importadas de bancos de Estados Unidos y Colombia.

“Hace dos semanas llegaron 240 mil semillas, que van a ir al cultivo a campo abierto para ocupar la totalidad de 35 hectáreas”, detalla Morales.

Esta compra, que se suma a otras importaciones anteriores, será la punta de lanza de lo que va a permitir “hacer procesos de reproducción y de mejoramiento genético para la obtención de una semilla 100% de propiedad del estado provincial”, dice Morales.

“Estamos en pleno proceso de la implementación de la infraestructura agrícola, científica y tecnológica. Una vez concluida la etapa, se larga el procedimiento de mejoramiento genético”, adelantan los directivos de Cannava.

Así Cannava apunta a desarrollar una cepa que estaría lista dentro de los próximos dos años. El objetivo es que presente un alto contenido de CBD, pero también se tendrán en vista los perfiles de otros cannabinoides como THC, CBG y CBN.

“Los distintos bancos con los que estamos trabajando tienen una apertura al desarrollo y complementar las actividades propias con un plan de mejoramiento tecnológico en un proyecto que produce cannabis medicinal”, destaca Morales.

La cepta justa

Encontrar las genéticas qué mejor se adaptan al clima local es una de las principales preocupaciones de los directivos de Cannava. Se trata de una condición necesaria para mantener una producción que planea llegar a los 50 mil frascos de aceite medicinal a fines de este año.

En este sentido, el Presidente de Cannava explica cuáles son los aspectos de mejoramiento que necesitan para el cultivo en la finca El Pongo, ubicada en la zona de los valles jujeños.

“Entre enero, febrero y marzo hay una fuerte intensidad de lluvias. Contar con una genética que se adapte mejor a ese régimen de precipitaciones va a resultar en una planta de mayor fortaleza”, detalla Morales, presidente de Cannava

“Entre enero, febrero y marzo hay una fuerte intensidad de lluvias. Contar con una genética que se adapte mejor a ese régimen de precipitaciones va a resultar en una planta de mayor fortaleza”, detalla Morales, quien también pretende acortar el período total de vegetación y floración a unos 90 días, cuando en la actualidad puede alcanzar los 140.

Por último, Morales destaca la importancia de la nueva resolución que permite la inscripción, registro y comercialización de semillas de cannabis en el país, que fue firmada esta semana entre el Ministerio de Salud, el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca y el Instituto Nacional de Semillas (INASE).

“Esta resolución abre una puerta más que interesante. Estamos convencidos que la soberanía tecnológica en lo que es la producción de cannabis medicinal depende de la semilla. Ser propietario de la semilla es lo que te da autonomía, sostenibilidad e independencia económica”, sostiene Morales.