El alcalde de Nueva York, Eric Adams, propuso instalar invernaderos para el cultivo de marihuana en las terrazas de los edificios públicos de la ciudad. El fin sería abastecer el mercado de uso adulto y al mismo tiempo generar ingresos para el mantenimiento de los edificios.
Aunque cultivadores y cultivadoras de las ciudades utilizan frecuentemente terrazas y balcones para el cultivo de cannabis, se trata de la primera propuesta de una producción masiva a gran escala en espacios urbanos administrados por el gobierno, en este caso de la ciudad de Nueva York.
Cultivo de cannabis en los techos de viviendas públicas
Más específicamente, los edificios donde se instalarían los invernaderos pertenecen al plan NYCHA, New York City Housing Authority, que ofrece alquileres accesibles para personas y familias de bajos ingresos o sectores vulnerables.
Este programa fue creado por el gobierno de la ciudad después de la crisis económica de 1930 y actualmente aloja a unas 700.000 personas en unos 335 edificios por toda la ciudad. Para tener una idea de la relevancia y el alcance del programa, en la ciudad de San Francisco, en California, viven unas 800.000 personas.
“Estamos considerando nuevas opciones para generar empleo y un mejor uso de nuestros techos. Estamos dispuestos a probar la opción que sea”, aseguró el alcalde de Nueva York, quien propone cultivar cannabis en la terraza de viviendas públicas
Con un presupuesto anual de mantenimiento de unos 40 mil millones de dólares, el programa recibe financiación del gobierno de Estados Unidos, algo que podría complicar el panorama ya que la marihuana continúa prohibida a nivel federal.
Además existe una controversia pública alrededor del hecho de que el organismo que aprueba o rechaza las aplicaciones al programa de viviendas puede negar este acceso si los solicitantes usan marihuana o tienen antecedentes penales relacionados.
Edificios sustentables
De acuerdo a las afirmaciones que realizó Adams este mes en la reunión de legisladores de origen africano, puertoriqueño, latino y asiático de Nueva York, la idea es avanzar en la inminente regulación del cannabis para uso adulto.
La propuesta supone incorporar a la industria a las poblaciones vulnerables que precisamente habitan los edificios del NYCHA, capacitando y ofreciendo trabajos en los proyectos de cultivo.
Además está la opción de reducir los costos de mantenimiento y mejorar la calidad del servicio facilitando el acceso a más personas gracias a los ingresos que puede producir el cultivo de cannabis en las terrazas de los edificios.
Consciente de que la propuesta generará un escándalo en el gobierno federal, Adams afirmó que apuntará a obtener una exención de la ley por parte del gobierno de Estados Unidos, para poder llevar a cabo un proyecto único en el mundo.
“Estamos considerando nuevas opciones para generar empleo y un mejor uso de nuestros techos. Estamos dispuestos a probar la opción que sea y si podemos conseguir el apoyo del gobierno federal, cumpliremos nuestras metas”, afirmó el martes pasado en una entrevista.