Generar tricomas sin cultivar cannabis parece imposible. Pero ahora, gracias al avance científico no solo es posible. Además, podría traer beneficios para el ambiente.
Si bien el proceso para obtener tricomas sin la necesidad de una planta se conoce hace tiempo, las legalizaciones de los últimos años permitieron aumentar la innovación en este campo. Tanto, que ya se habla de una producción de cannabis en el espacio exterior.
Este año, la empresa estadounidense BioHarvest, especializada en biotecnología, anunció la venta de tricomas ricos en cannabinoides. Lo novedoso es que su producción no requirió el cultivo tradicional de una planta de cannabis.
“Vemos la capacidad potencial de cultivar valiosos cannabinoides menores. Esto, en cantidades significativamente más altas en comparación con su crecimiento en la tierra”, explicó Ilan Sobel, CEO de BioHarvest.
Según indican desde la empresa, “obtienen CBD a base de cáñamo y espectro completo de cannabinoides consistentes. Es libre de hongos correspondientes a varias cepas de cannabis y no es genéticamente modificado”, agregan desde la empresa.
Por otro lado, los responsables de BioHarvest destacan beneficios importantes sobre de esta innovación.
“El primero es que podemos obtener tricomas ricos en cannabinoides de una manera más veloz. Así, es posible acelerar procesos para obtener los componentes necesarios para producir una mayor cantidad de medicamentos por ejemplo”, señalan.
La segunda ventaja, según la compañía, es que esta técnica no genera contaminación ambiental.
“Nuestra tecnología utiliza un 99,99% menos de tierra que la agricultura tradicional. Además, produce cero emisiones contaminantes y no utiliza disolventes ni pesticidas en el proceso de fabricación”, revelan. Y concluyen: “Todo esto genera aguas residuales que son 100% biodegradables. No contienen productos químicos y no producen residuos peligrosos en el proceso de fabricación”.
¿Qué son los tricomas y para qué sirven?
Los tricomas son un tipo de glándula vegetal muy común en una gran cantidad de especies. En el cannabis son la fábrica en miniatura de los compuestos aromáticos, medicinales y psicoactivos que caracterizan a la planta.
En los tricomas se encuentran los efectos del cannabis porque allí están los cannabinoides. Se tratan de los principios activos producidos por la planta de cannabis. Es decir, las sustancias que generan efectos terapéuticos y psicoactivos.
Además, funcionan como defensa ante el ambiente y sus diversos factores como el clima y los predadores. Presentes en mayor cantidad en las hembras dan ese aspecto tan peculiar azucarado o nevado en los cogollos.
Producción de cannabis en Argentina
En la Argentina, la generación de tricomas sin la necesidad de cultivar la planta de cannabis existe.
“El beneficio de cultivar tricomas que producen cannabinoides es que podés cultivarlos en cualquier lado. Virtualmente, hasta en la Luna”, le indica a THC Esteban Hernando. Él es co-fundador de Calice Biotech, una start-up incubada en la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM). La misma se dedica al mejoramiento genético de cannabis empleando las últimas tecnologías bioinformáticas y de edición génica.
“Para lograr este proceso se usan biorreactores con medio de cultivo líquido. Con todo lo que necesitan las células/tricomas para vivir”, comenta Hernando, quien es doctor en biología molecular y biotecnología. “Además, se requiere iluminación artificial aunque es muy poca intensidad la que se necesita”, continúa.
Durante su explicación a THC, el experto comenta que en esta técnica “no son necesarias todas las cosas que implican tener una planta. Principalmente, no necesitas sustrato ni riego”, afirma.
Generar tricomas sin cultivar cannabis: pros y contras
Esteban Hernando señala que la producción de tricomas con biorreactores es más rápida en comparación al cultivo de plantas en tierra. “Si bien el comienzo es más lento y costoso en términos de dinero, una vez que los tenes crecen muy rápido”, dice. Que al inicio sea más costoso se debe a la necesidad de aislar células y generar los tricomas.
Otra ventaja que señala el experto es la posibilidad de generar tricomas prácticamente en cualquier lugar ya que no se necesita campo. “Inclusive podrías hacer un by-pass a muchas cuestiones regulatorias. Porque la planta está penalizada pero el cultivo celular (muy usado en la industria farmacéutica) no. Por eso desde hace unos años se proponía como alternativa para hacer medicamentos conteniendo cannabinoides”, reflexiona Hernando.
En cuanto a la calidad de los tricomas obtenidos, el doctor en biología molecular señala que los tricomas generados en biorreactores son similares. “Pero no son 100% idénticos a los que encontras en una planta silvestre. Esto se debe al ambiente en el cual se desarrolla”, destaca.
– ¿Cuál es la ventaja que más destacas?
– A nivel más tecnológico, esta técnica da la posibilidad de poner a punto la producción de cannabinoides minoritarios. Estos se producen en muy bajas concentraciones en las condiciones normales en una planta. El hecho de poder controlar todas las variables ambientales en un biorreactor te da la posibilidad de poner a punto las condiciones precisas. Así, se maximiza la producción de estos cannabinoides minoritarios, que son muy difíciles de obtener en concentraciones significativas en plantas. Me parece que esta es la oportunidad más interesante.
Cómo generar tricomas sin cultivar cannabis
– ¿Cuáles son los pasos para realizar este proceso?
– Cuando se hace cultivo de células en biorreactores, inicialmente uno inocula el reactor. Eso es poner un número pequeño de células en el mismo con el medio de cultivo líquido. Luego las condiciones de cultivo del reactor se ajustan para favorecer la división celular, entonces en esa etapa lo que haces es generar más tricomas. Una vez que el reactor está lleno de células, en este caso tricomas, lo que haces es inducir que los mismos produzcan cannabinoides. Esa inducción se hace cambiando las condiciones de cultivo. Principalmente la temperatura, irradiancia o composición de la luz, como agregar ultravioleta o un compuesto, químico o proteico, que induzca la producción de los cannabinoides.
– Antes decías que los tricomas no son 100% iguales. ¿Por qué?
– Todos los seres vivos nos moldeamos por el ambiente que nos rodea. Un biorreactor donde todas las condiciones están controladas y estables es muy diferente a vivir en la superficie de una hoja en una planta de cannabis cultivada en suelo. Los cannabinoides, terpenos y flavonoides que encontramos en los tricomas son producto de la interacción de la genética con las condiciones ambientales. Difícilmente eso se puede recrear en un biorreactor.
Cuáles son los avances para el futuro
– ¿Veremos más avances en el futuro?
– Si bien el cultivo de células vegetales se conoce hace mucho tiempo, cada planta es un mundo. Es un trabajo muy artesanal. Como el cannabis estaba prohibido, hasta el 2018 había pocos reportes de la aplicación de estas tecnologías en la planta. Actualmente se está avanzando rápido, y nos encontramos con que cada variedad de cannabis tiene requerimientos muy particulares. Tan particulares que hay variedades que aún no se han logrado cultivar in-vitro con éxito. Seguir investigando este tipo de tecnologías va a abrir la puerta a descubrimientos. Muchos permitirán mejorar los niveles de producción de cannabinoides en cultivo in-vitro. También producir fácilmente cannabinoides minoritarios para poder estudiar sus potenciales medicinales. Y acelerar procesos necesarios para otros procesos tales como el mejoramiento vegetal mediante tecnologías de última generación.
