Las nuevas tecnologías dieron origen a una posibilidad inesperada: agregar cannabis a cualquier comida o bebida, sin necesidad de hacerlo durante la preparación. Te contamos como funcionan el THC y CBD en polvo, los potenciadores cannabicos.
A medida que la legalización avanza y aumenta la aceptación del cannabis, los comestibles continúan evolucionando en lo que respecta a sus formas y funciones. El ser humano ha añadido marihuana a bebidas como el bhang desde la antigüedad y, en las últimas décadas, los amantes del cannabis han incorporado el THC a todo tipo de alimentos,
desde brownies hasta salsas para pasta.
Si probaste comestibles de marihuana, sabés que las recetas pueden ser bastante ambiguas y que es una experiencia muy distinta a la de fumar o vapear. Después de dar una calada, los cannabinoides –como el THC–, pasan rápidamente al torrente sanguíneo para hacer efecto.
Sin embargo, cuando ingerís por vía oral, los cannabinoides se someten al metabolismo de primer paso en el estómago y el hígado antes de entrar en la circulación sistémica. Esto significa que los comestibles tardan más
en hacer efecto, ya que hay que esperar entre 30 minutos y dos horas para sentirlo. Después de comerte un brownie, por ejemplo, tu cuerpo solo absorberá un 4-12% del THC.
Los comestibles modernos ofrecen una biodisponibilidad superior al 60%, lo que significa que solo necesitarás tomar una dosis mucho más pequeña para conseguir el mismo efecto. Como ocurre con todas las tecnologías en el
capitalismo, los comestibles de cannabis son cada vez más rápidos y eficientes. Depende el gusto, eso puede ser una buena noticia. O no.
¿Cómo funcionan el THC y CBD en polvo?
Cada vez son más los usuarios que adoptan hábitos de vida saludables, por lo que estos comestibles mejorados sin duda alejarán a la gente de bebidas con alcohol, y les acercarán al agua, la soda o, por qué no, un rico cóctel cannábico. Las empresas de alimentos cannabicos más innovadoras han desarrollado fórmulas de acción rápida a base de emulsionantes y micropartículas, que surten efecto en tan solo 10 minutos.
Estos avances no solo han reducido el tiempo de aparición de los efectos de consumo por vía oral, sino que además aprovechan la acción de los emulsionantes para aumentar su biodisponibilidad. Por lo tanto, ya no tendrías que esperar dos horas para que los comestibles hagan efecto, ni conformarte con una biodisponibilidad de solo un
4%. Esta sustancia actúa en cuestión de minutos, y tu cuerpo absorberá unas cantidades mucho más altas de la molécula en esta forma soluble en agua.
Estos “potenciadores cannábicos” de alimentos y bebidas ya se encuentran en el mercado legal de Estados Unidos y vienen en pequeños sobres de bolsillo, lo que los hace totalmente cómodos y transportables. Estas presentaciones ofrecen experiencias de 2.5, 5mg de THC y, para aquellos más experimentados, una de 10 mg de THC por sobre.
Otras marcas ofrecen la combinación de 2mg de THC y 4mg de CBD por paquete, ya que enfatizan en los objetivos de relación, porque cada uno amplifica las buenas cualidades del otro. Con una variedad de sabores, que van desde sandía, lima-limón, naranja y cardamomo, pomelo y romero, frutos rojos, prometen ser el futuro de las bebidas de uso social ya que los efectos comienzan diez minutos después de ser ingerirlo, podés controlar y aumentar tu efecto porque tenés noción de la exacta cantidad micro dosificada de THC, tiene un efecto similar a la de los licores tradicionales, son elaborados a partir de flores vivas, son bajos en calorías, ayudan a evitar los efectos nocivos de la inhalación de humo, se pueden disolver en todo tipo de líquidos y, el detalle más importante: no existe la resaca.
Por lo tanto, se asume que el futuro de las bebidas sociales podría estar frente a nuestros ojos. Posiblemente estos potenciadores llegaron para quedarse y cambiar nuestros hábitos. Quizás ayudando a un uso más responsable y saludable a la hora de tomarse un rico trago con amigos, totalmente libre de resacas y arrepentimientos.