Para salir de la crisis económica, el presidente de Turquía Recep Erdogan impulsó un plan piloto para cultivar cannabis en 20 provincias turcas. Erdogan reconoció la histórica presencia del cannabis en la región, explicó el proyecto con un discurso donde incluso afirmó que de niño, en su hogar se tenía cannabis para múltiples usos.
“Mi mamá tejía bolsas que usábamos para hacer la compra. No las tirábamos y las reutilizábamos, eran ecológicas y se hacían con cannabis”, recordó el presidente turco. Pero mirando al futuro la intención es estimular tanto la producción de cáñamo industrial como prepararse para el mercado internacional de cannabis medicinal y sus derivados.
Erdogan, de tendencia nacionalista, afirmó que la actual situación del cannabis en Turquía se debe a las presiones de los “imperialistas occidentales y enemigos de la patria”, que a finales de los años setenta impulsaron la prohibición del cannabis, tradicional en el país.
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