Los hongos psilocybes, género al que pertenecen los llamados cucumelos, empiezan su camino a la legalidad.
En el hemisferio norte, el proceso parece similar al de la regulación del cannabis. En Estados Unidos, ciudad por ciudad comenzaron a verse cambios. Santa Cruz, en el estado de California, se convirtió en la tercera localidad en despenalizar el uso de los hongos visionarios detrás de Denver y Oakland.
No es un delirio: cada vez son más los estudios que retoman el estudio de las sustancias visionarias para uso terapéutico. De hecho, sigue sumándose evidencia respecto a su efectividad en el tratamiento del estrés postraumático.
En el caso de Santa Cruz, el Parlamento local aprobó una norma que permite la tenencia y uso de sustancias visionarias de origen vegetal: no sólo los hongos psilocybe, sino también la ayahuasca y varios tipos de cactus ya no serán objeto de persecución policial o legal. El cultivo y venta seguirá penado.
Los sintéticos como el LSD o el MDMA no están contemplados por las ordenanzas, aunque se estima serán el centro de nuevas campañas dado que sus usos terapéuticos controlados también acumulan cantidad de evidencias.