El senado de México está a punto de discutir un proyecto que permitiría que los campesinos del interior del país puedan producir marihuana legal.
El proyecto, que además plantea la posibilidad de cultivar, comercializar y exportar cannabis, buscaría solucionar una problemática grave: el crimen organizado reclutando campesinos de bajos recursos para la producción ilegal de drogas.
Se calcula que unos 300.000 campesinos se dedican a cultivos ilegales, que rinden hasta 9 veces más que los cultivos de algodón o maíz.
En regiones como Oaxaca o Guerrero, se calcula unos 300.000 campesinos se dedican a cultivos ilegales, que rinden hasta 9 veces más que los cultivos del algodón o maíz. Por esta razón, el proyecto busca estimular el cultivo legal de marihuana para sustituir los cultivos dirigidos al mercado negro.
“Queremos que los beneficios de la siembra también se queden en el campo, en la gente del medio rural”, afirmó José Narro, presidente de la Comisión de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural y senador de México.
La propuesta impulsa la creación de un Instituto Mexicano de Cannabis, similar al IRCCA uruguayo, que emitirá licencias para producción, elaboración, venta y importación-exportación de cannabis y sería creado en enero de 2021.