Que la marihuana afecta la memoria, es uno de los pocos mitos fogoneados por la prohibición que se basa en un hecho real: todos los usuarios de cannabis sabemos que un efecto notorio de la planta es alterar la manera en que funciona la memoria a corto plazo, produciendo el famoso “cuelgue”.
Sin embargo, un estudio de la Universidad de Pittsburgh, Estados Unidos, concluyó que las personas jóvenes que utilizan cannabis no ven afectada su memoria en el largo plazo. El resultado, desbanca uno de los grandes miedos sembrados durante décadas.
Los personas que comenzaron a usar cannabis siendo jóvenes no tuvieron dificultades para superar un test standard de memoria funcional. Tampoco presentaron alteraciones cognitivas.
El test fue acompañado de una resonancia magnética para evaluar la función orgánica cerebral que tampoco acusó efectos significativos. Lo sorprendente para muchos es que los usuarios de cannabis mostraron mejor rendimiento que aquellos que no habían usado nunca la planta.
Brenden Tervo-Clemmens, investigador a cargo del estudio, afirmó que no encontraron relación directa entre el cannabis y el deterioro de la memoria. Tampoco afirmó que el cannabis la mejore y aclaró que los resultados pueden deberse a una mayor actividad cerebral natural de los individuos.
Los científicos universitarios pidieron que se profundicen este tipo de investigaciones, fundamentales para entender si el cannabis realmente puede producir alteraciones cognitivas a largo plazo.
Acá pueden acceder al estudio completo: http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S1053811917310637?via%3Dihub