Convocada por organizaciones cannábicas, cultivadores y asociaciones de usuarios de cannabis medicinal, el jueves pasado se realizó en varias ciudades de Argentina la Octava Marcha Nacional de la Marihuna.
En Buenos Aires, reunió unas 3 mil personas que marcharon por Avenida de Mayo hasta el Congreso de la Nación. Se trató de la primera Marcha Nacional de la Marihuana después de la sanción de la ley que regula el uso del cannabis medicinal en el país. Los manifestantes avanzaron al canto de “yo no soy un delincuente, yo no soy un criminal, yo cultivo marihuana, no más presos por plantar”.
“Cruzamos la Avenida 9 de julio y hubo gente que nos aplaudía, es la priemra vez que pasa, creo que la opinión pública maduró un montón, entiende lo que venimos a hacer”, le contó Valeria Salech, de Mamá Cultiva Argentina a THC. Además deslizó que “lo nuestro también es un derecho humano porque está relacionado directamemente con la salud, no es un capricho”.
“El cultivo está más vivo que nunca. El gobierno nos da la espalda y necesitamos cultivar para que los usuarios medicinales tengan acceso a los aceites. Seguimos criminalizados, hay una cacería a los cultivadores y gente presa”, sostuvo Facundo Rivadaneira, del Frente de Organizaciones Cannábicas Argentinas (FOCA). Y aseguró: “Hay cada vez más gente cultivando en todo el país”.
Gilda Colman, de Salud Cannábica aseguró que “la planta tiene que ser libre” y que ” si quieren hacer negocio que lo hagan, pero que dejen a la gente cultivar, no pueden prohibir lo que a muchas personas les puede hacer bien, no hay ley que pueda manejar el dolor. La ley que se aprobó hace que mucha gente termine yendo al mercado negro a comprar por temor a cultivar”.
Al terminar, el activista Matías Faray aseguró que “fue una marcha con mucha intensidad, con mucha gente con ganas y necesidad de conocer al respecto, y muchos usuarios medicinales”, y remarcó: “La situación del autocultivo en 2017 es la misma que en 2010 cuando empezamos a marchar, todavía no cambió nada”.