Los coffee shops holandeses no van a cerrar. Al contrario, el gobierno holandés pretende mejorar el sistema de venta legal de cannabis.
El objetivo central es regular cómo y dónde se produce la marihuana que llega a los mostradores. Hasta hoy en Holanda se permite la venta de cannabis en coffe shops pero el cultivo de la planta está prohibido, por lo que los locales deben abastecerse del mercado negro.
Para resolver finalmente la situación, el estado lanzará un programa de cultivo para determinar cuál es la mejor manera de abastecer a los coffe shops. Se trata de la ley de “experimentaciones con el cultivo tolerado de plantas de cannabis para uso recreativo”, y será implementada en seis municipios.
Según el gobierno, esta experiencia, busca determinar “si el cannabis controlado puede ser sumistrado legalmente a los coffee shops y cuáles serían los efectos”.