En España, la regulación de los clubes y asociaciones cannabicas podría generar entre 200 y 600 millones de euros en impuestos.
La cifra fue estimada por la Confederación de Federaciones de Asociaciones Cannabicas de España (CONFAC) que agrupa unos 1.500 locales de este tipo en todo el país.
Para llegar a ese monto, la CONFAC no sólo se basó en el mercado del cannabis en sí sino también los ingresos fiscales que generaría regular la actividad de los clubes cannábicos.
En promedio estos clubes emplean a cinco empleados, un total de 7.500 personas en todo el país. De regular esta actividad, la CONFAC estima que podría llegar a 20.000 personas empleadas en un rubro que hoy no tiene cobertura legal.
El pronóstico también tuvo en cuenta las hipotéticas habilitaciones frente a un ente regulador, la actividad inmobiliaria en un boom de expansión de los clubes, tasas de inspección y cargas fiscales relacionadas.
Si bien el aspecto impositivo es algo que los Estados están mirando con interés en medio de la crisis económica mundial, la portavoz de la CONFAC, Ana Afuera, advirtió que no es la única razón para regular el cannabis: “La salud pública, la seguridad ciudadana y los derechos humanos deberían ser las principales razones para acabar con esta situación”.